Mollejas de chivo lechal con oloroso y crema de patatas. Tartar de atún.
No se mueve ni un ápice el restaurante Yerbagüena (Campillos, Málaga) de esa trayectoria que marca su patrón Javier Carmona desde hace tres lustros. A saber: cocina sencilla pero rica, buscando un producto distintivo, una oferta de vinos sobresaliente, sobre todo si hablamos de vinos de Jerez, y, por encima de todo, una sensación de restaurante con personalidad y de una hospitalidad genuina, no impostada. A Yerbagüena hay gente que va a tomar algo en la barra, a picar en las mesas altas o a sentarse a comer en condiciones. Incluso a alargar la sobremesa o a alguno de esos conciertos y festivales que organizan. Y todos son bienvenidos, con profesionalidad y conocimiento. Hostelería de calidad. @restauranteyerbaguena @javi_yerbaguena