Hígado de conejo con ostra. Escabeche de corzo.
Recuerdo de una cena memorable en Lera (Castroverde de Campos, Zamora). Con la mirada inquieta de quien pretende exprimir su Tierra de Campos cada temporada para aumentar su caudal creativo y con el convencimiento de que a la potencia gustativa de la caza conviene más restarle elementos que sumárselos para preservar su pureza, Luis Alberto Lera continúa su inédito camino en la cocina cinegética y de territorio. Sobre la base tradicional de la cocina de su madre, Minica Collantes, siempre presente en el fondo de sus elaboraciones, Luis incorpora elementos, cocciones y nuevas ópticas, refina y perfecciona platos y evoluciona una cocina cada vez más distintiva y singular. Pocos lugares se me ocurren en el mundo para disfrutar así de de la cocina venatoria. Sumemos, como siempre, el indudable encanto de Natalia Fernández en la dirección, el trato sabio, pausado y cariñoso de Ramón González en la sala y una selección de vinos tan audaz y sorprendente como acertada a cargo de Adrián Ferrón en la bodega. La estrella llegó tarde pero llegó (y lo que les queda por delante). @luislera @paranatalia @minicacollantesblanco @ferronadria16