Lengua de chivo lechal malagueño estofada con judías verdes. El lujo no siempre tiene formato de trufa o lata de caviar. Es más, a veces es todo lo contrario.

Siempre reconforta volver a Arte de Cozina (Antequera) pero siempre me voy con la sensación de que lo visito demasiado poco. La suya es una cocina que poco a poco se nos va escapando entre los dedos y que va cayendo en el olvido. Charo Carmona cocina por derecho y sin concesiones, con el rigor de quien conoce el recetario y se mantiene siempre fiel a él. No en vano se apoya en Fernando Rueda, erudito de nuestra historia gastronómica. Y lo hace en su encantador restaurante, en el corral del Antiguo Coso San Francisco del siglo XVII, en una corrala con chimenea y braseros bajo las mesas. La hospitalidad y la calidez son las señas de identidad de la casa pero sobresale esa carta entera que es una oda a la cocina tradicional del interior de Andalucía . Cambia en función de lo que regala el campo y se hace muy difícil escoger. Quizás algún día la gastronomía malagueña - la andaluza, la española - será capaz de reconocer lo que Charo hace por la cocina tradicional de esta tierra. @artedecozina